MADRID, ESPAÑA// Biowatio es una alianza de empresas con oficinas en toda España que ofrece al consumidor energía para producir calefacción o agua caliente a un precio muy competitivo gracias al uso de los mejores equipamientos. Hasta ahora las salas de calderas eran inversiones realizadas y gestionadas por los usuarios.
Con Biowatio, el futuro de la venta energética a partir de calderas de biomasa por fin ha llegado a España.
Biowatio reconoce que muchos usuarios no desean ni realizar la inversión del equipamiento de una sala de calderas ni preocuparse de su buen funcionamiento, precios de combustibles, etc. También, Biowatio sabe que el futuro no está en equipos que funcionen a partir de combustibles fósiles y ha apostado plenamente por tecnologías de combustión de biomasa.
Biowatio financia y opera íntegramente una sala de calderas y vende la energía medida por un contador al usuario, siempre a precios inferiores a los que estaba pagando.
«Sustituimos salas de calderas existentes por salas de calderas de biomasa de última generación» – nos comenta Philipp Rockmann, responsable técnico de Biowatio. – «Realizamos toda la inversión y nos ocupamos de que los equipos funcionen como un reloj suizo, ya que nuestro negocio consiste en vender la energía calorífica que producen esos equipos a un precio muy competitivo. Por supuesto, la muy alta eficiencia energética de nuestros sistemas es la clave. Cuanto más eficientes sean, menos tiempo hace falta para amortizar la inversión y rentabilizar las instalaciones.»
Philipp Rockmann es alemán. Tanto en su país como en Austria, Suecia, Finlandia, Francia y muchos otros, el concepto de Venta Energética esta muy extendido desde hace décadas. -«Con Biowatio todos salen ganando. El cliente pagará menos de lo que está pagando ahora por calefacción y agua caliente sanitaria asegurándole un ahorro. Biowatio gestionará la instalación y, con el ahorro conseguido gracias a su alta eficiencia energética y gestión, recuperará su inversión. Tras un periodo de amortización de entre 10 a 15 años, y si el cliente lo desea, la instalación pasará a ser de su propiedad.»- nos explica este ingeniero alemán obsesionado por el ahorro y la eficiencia energética.
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