- Los buques de carga generan electricidad a 25c/kWh, lo que podría ahorrar miles de millones a Europa
- Los buques pueden conectarse a la red eléctrica de un país en tan sólo 30 días
LONDRES, 29 de septiembre de 2022 /PRNewswire/ — Europa se enfrenta a la perspectiva de un racionamiento de la energía a medida que el continente se acerca al invierno, y los gobiernos instan a los hogares y a las empresas a reducir su consumo en un intento de evitar los cortes de electricidad.
Pero una empresa tiene una solución que puede desplegarse casi inmediatamente, es flexible y reduce el riesgo de apagones.
Las instalaciones flotantes de generación de energía de Karpowership, conocidas como Powerships, están totalmente integradas con toda la infraestructura necesaria a bordo y pueden conectarse directamente a la red eléctrica de un país en tan sólo 30 días.
Los buques son multicombustibles y funcionan con gas natural, fuel-oil de bajo contenido en azufre o gasóleo de muy bajo contenido en azufre, lo que garantiza que sean siempre la opción más rentable.
Karpowership puede producir electricidad a menos de la mitad del precio medio en Europa, a unos 25 céntimos por kilovatio-hora, lo que puede ahorrar a los distintos países miles de millones de euros en costosas importaciones de energía.
«A medida que se acerca el invierno y la crisis energética de Europa da pocas señales de remitir, la región está dando pasos hacia el racionamiento de energía», dijo Zeynep Harezi, directora comercial de Karpowership. «Karpowership tiene una solución asequible, flexible y que puede desplegarse casi inmediatamente para ayudar a aliviar la presión sobre los escasos suministros».
Si la opción preferida es utilizar los activos de gas natural existentes, también se dispone de FSRU dedicadas para su conexión inmediata a las centrales. Esto ayuda a reducir la competencia regional por el suministro de GNL, manteniendo las reservas estratégicas para las centrales eléctricas terrestres.
Dado que los Powerships se entregan con toda la infraestructura que necesitan, la perturbación de las comunidades locales es mínima, y dejan un impacto medioambiental nulo cuando se desmantelan. Los buques simplemente se desenchufan y se vuelven a desplegar allí donde más se necesitan.
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