Madrid/Bogotá- Enertis, consultora e ingeniería de proyectos renovables, sigue reforzando su posición en el mercado colombiano con la interventoría en la construcción de la segunda planta fotovoltaica de 8,06 MW de Celsia en Bolívar.
Celsia, la empresa de energía del Grupo Argos, ya había adjudicado a Enertis la supervisión de la construcción de la planta ‘Yumbo Solar’, la primera planta del país de gran escala conectada a la red, con más de 35.000 módulos y una producción de energía suficiente para abastecer a 8.000 hogares. Tras esta colaboración, Enertis ha sido elegida nuevamente para realizar la interventoría de la nueva planta que se va a construir en el departamento de Bolívar. La granja solar Bolívar es la segunda planta de gran tamaño que Celsia construirá en el país y forma parte de su plan de crecimiento en el sector de las renovables no convencionales en Colombia.
Entre los trabajos a realizar Enertis llevará a cabo actividades como la revisión de la ingeniería de detalle y la verificación del suministro de materiales y equipos estipulados para la planta, así como una supervisión de los aspectos eléctricos, civiles y de seguridad y salud durante la construcción y la puesta en marcha de la planta. Estas actividades serán llevadas a cabo por un equipo de expertos de diferentes áreas de conocimiento técnico, que realizarán una labor de supervisión tanto en oficina como en obra, esto con el acompañamiento de personal de Celsia para compartir conocimientos.
Esta adjudicación contribuye al crecimiento y la consolidación de Enertis en Colombia, después de más de dos años trabajando en el país y tras la apertura de delegación permanente en 2017. Hasta la fecha, el equipo de Enertis en Colombia ha participado en más de 20 proyectos en diferentes fases de desarrollo y construcción, tanto en procesos de Due Diligence técnica, como mediante la provisión de servicios de ingeniería a desarrolladores en diferentes zonas del territorio colombiano. La experiencia acumulada en el país supera ya los 600 MW de potencia.
En los últimos años Colombia ha adoptado varias medidas para la introducción de las energías renovables no convencionales en la matriz energética. Tras la introducción de la ley 1715 en 2014, que regula la concesión de ciertos incentivos para los proyectos de este tipo, recientemente la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) aprobó la resolución 030 por la que pequeños generadores podrán producir energía para el autoconsumo vendiendo los excedentes. Además, el Ministerio de Minas introdujo en marzo de 2018 el decreto 570 por el que se describe el marco regulatorio para la publicación de un mecanismo de contratación de fuentes de energía no renovables a largo plazo. Se espera que dicho decreto se traduzca en la publicación inminente de las reglas de juego para la convocatoria de una subasta a gran escala. Dicha subasta se espera que adjudique entre 1 GW y 1,5 GW de potencia. Actualmente la Unidad de Planeación Minero-Energética (UPME) presenta un registro de proyectos solares y eólicos en desarrollo en Colombia superior a los 5 GW de potencia.
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